La radio comunitaria y su papel en la reconstrucción de tejidos sociales y comunicativos en Colombia
Marisol Mesa, presidenta de la Red de Emisoras Comunitarias del Tolima – Colombia, destaca la importancia que ha tenido el trabajo de las radios en zonas conflictivas de Colombia, a fin de que las comunidades sean escuchadas, participen activamente y ejerzan su derecho a la libertad de expresión.
Marisol Mesa, es Comunicadora Social, Periodista, docente en la Universidad del Tolima – Colombia y directora de Tu Radio, emisora universitaria. También es la presidente de la Red de Emisoras Comunitarias del Tolima. (foto: Facebook) |
Por Jans Álvarez / Sarita Florián | CONCORTV
Colombia es un país pionero en cuanto al desarrollo de las radios comunitarias, al ser uno de los primeros países en implementarlas en América Latina, según señala el portal El Espectador. Hasta abril de 2012, Colombia contaba con 686 radios comunitarias según el Mapa Interactivo de la Radio. Actualmente cuenta con aproximadamente 900 radios de este tipo según nos cuenta Marisol Mesa, Presidenta de la Red de Emisoras Comunitarias del Tolima – Colombia, con quien el CONCORTV conversó para conocer el impacto de las radios comunitarias en Colombia, conocer el trabajo que realiza la Red y las dificultades por las que han pasado las radios que la conforman.
¿Cuál es el enfoque que tienen y hacia dónde apuntan las radios comunitarias en Colombia?
"La radio comunitaria visibiliza temáticas que otros no ven" |
Tanto en Colombia, en Perú, como en otros países de América Latina, las radios comunitarias cumplen la misma función: son emisoras donde se ve reflejada la comunidad, donde hay un empoderamiento de la sociedad base. Son espacios caracterizados por la participación, la inclusión, la diversidad, el respeto, y que se convierten en un punto de encuentro entre grupos de población. Tienen un rol importante dentro de la sociedad, sobre todo de visibilizar temáticas que otros no ven, pero hay que resaltar que no en todos los países eso es una realidad.
¿Cómo es el trabajo que ha venido desarrollando la Red de Emisoras Comunitarias del Tolima con las radios y cuál es la situación actual de las mismas?
En Colombia el tema de las emisoras comunitarias desde la parte legal empezó desde la Constitución de 1991, donde se hace referencia a que las comunidades deben tener su propio medio de comunicación. Desde este año se tuvo la oportunidad de que se entreguen licencias a las comunidades interesadas en tener una radio comunitaria, obviamente cumpliendo con los requisitos que solicitaba el estado.
En la región donde vivo, El Tolima (centro de Colombia), existen alrededor de 22 emisoras comunitarias legalmente constituidas, y otras a las que yo llamo legítimas en vez de ilegales, pues aunque no sean legales, son legítimas, porque son las emisoras de la gente, la gente los reconoce, acuden a ellas, los escuchan e interlocutan entre ellos. Nosotros desde la Red, vinculamos a todas las emisoras como colectivos de comunicación apoyados por el Ministerio de Cultura de mi país, con quienes tenemos encuentros periódicos y acuerdos para realizar un trabajo en conjunto.
En este momento Colombia tiene una gran dificultad pues desde el gobierno se está presionando para que las emisoras técnicamente cumplan con ciertos requerimientos. Las radios comunitarias, como todas las demás, tienen que tener equipos de producción base, equipos de irradiación, recursos que no todas las emisoras tienen. Muchas estaciones comunitarias han venido utilizando transmisores elaborados artesanalmente por personas del lugar, que en base a conocimientos adquiridos de la vida diaria, los fabrican y los llaman “chizos”, los cuales no cumplen con las normas técnicas. El estado empezó a visitar a estas estaciones de radio, luego pasó a multarlos por esta irregularidad y posteriormente a cerrarlos por no pagar las multas respectivas. Ante ello, estamos programando para octubre un “Encuentro de Medios Comunitarios del Sur del País”, en el que nos reuniremos redes y sociedades sin ánimo de lucro para encontrar soluciones a este problema vigente hasta hoy.
¿Cuáles consideras que son las dificultades y fortalezas con las que cuentan las radios comunitarias en Colombia?
Las dificultades están en los términos de sostenibilidad económica. Estas radios cumplen un papel fundamental en mi país, un país fragmentado, un país donde no todas las comunidades tienen acceso a los medios de comunicación por la geografía, pero la radio sí llega a todas partes. En Colombia las radios comunitarias son radios locales, cada municipio, localidad tiene por ley, derecho a una radio comunitaria, y cuando son ciudades, dependiendo de la población y extensión, tienen derecho a más radios de este tipo. Para sostenerse son muy creativos; se sostienen con recursos internacionales, auspicios, pues las pautas (publicidad) son mínimas y muy baratas. Se inventan bonos, las “radiotones”, eventos en donde hacen colectas en toda la comunidad, eso ha hecho que permitan pagar sus impuestos.
"La radio llega a todas partes" |
La fortaleza es el papel que cumplen estas radios para la reconstrucción de tejidos sociales y comunicativos del país, porque es un país afectado por muchos años por problemas como narcotráfico, guerrillas, desempleo, pobreza. Estas radios han hecho que la gente más vulnerable, que suele callar porque no tiene acceso a la libertad de expresión en los medios comerciales, pueda expresarse y hacer llegar su voz de protesta a muchas partes del país. La radio comunitaria de manera creativa ha permitido que estas comunidades sean escuchadas.
¿Cómo es el contacto, la aceptación que las radios comunitarias tienen con las comunidades colombianas?
Son radios empoderadas, la gente sabe que existen, los escuchan, acuden a ellos, se familiarizan con ellos y dentro de las comunidades existen personas que lideran grupos de seguidores. Cada emisora tiene una junta de programación, compuesta por diferentes sectores sociales, y en cada sector hay un representante de la comunidad, y son ellos los que definen la parrilla de programación, la ajustan, la modifican y eso hace que haya inclusión y participación de todos, pero hay que resaltar que también a la gente le cuesta reconocer qué es una radio comunitaria, asumen que son radios comerciales “chiquitas”, y para ello se hacen talleres para informar a la gente y es gratificante cuando la gente dice “ah ya, entonces es una radio que me pertenece, y yo puedo participar”.
¿Qué experiencias de éxito de radios comunitarias, en tu país, consideras han sido las que más han sobresalido y por qué?
"Estas radios han hecho que la gente más vulnerable pueda expresarse y hacer llegar su voz de protesta a muchas partes del país" |
Al norte está la emisora, Café 93.5, que nació con alrededor de 400 jóvenes soñadores de la radio, que detrás de ese proceso, han fundado una escuela de formación para otros jóvenes, donde hacen trabajos de teatro, grafiti, comics. Es una apuesta cultural muy grande para utilizar el tiempo libre en cosas productivas. Hace un año les quitaron los equipos porque no pagó impuestos y estos jóvenes, en base a colectas, lograron reunir el dinero para recuperar sus equipos.
Rio Blanco Stereo es otra radio comunitaria ubicada al sur de El Tolima. Es una región donde viven las tropas de las FARC, pero también donde hubo una intromisión paramilitar, una fuerza de guerrilla de derecha que buscaba acabar con las guerrillas generadas por los de izquierda, pero estaban acabando con la población, que era la más afectada. En esta comunidad la radio ha tenido un papel fundamental en la reconstrucción de los tejidos comunicativos. Allí trabajamos para identificar problemas y replantear temas conjuntamente con el Ministerio de Cultura.
En el Perú hay sólo una radio comunitaria autorizada por el estado y en tu país hay muchas. ¿Qué crees que está pasando en nuestro país?
En mi país hay muchas radios comunitarias, existen alrededor de 900 legalmente constituidas, y sí hay un apoyo por parte del gobierno en lo legal. Todas las empresas públicas tienen que dejar un espacio, un rubro de los recursos para las radios comunitarias. En el Perú siento que se tiene que trabajar desde la legislación, pues teniendo claro el significado de las mismas, habría mecanismos de protección. Las radios comunitarias son radios alternativas, son distintas y no están dentro de los intereses de los grupos económicos y políticos. Eso es algo que se debe trabajar.