Inédita huelga de radio y TV francesa contra posible fin de la publicidad
(AFP).- Una inédita huelga afectaba este miércoles la programación de la televisión y la radio públicas francesas, en protesta contra la decisión del presidente Nicolas Sarkozy de suprimir la publicidad, lo que según los sindicatos pone en peligro el futuro del servicio público.
La mayoría de la ediciones de información de Radio France y las cadenas de France Televisión habían sido o bien anuladas, o remplazadas o interrumpidas por difusiones puntuales o presentaciones inhabituales.
Esta huelga de 24 horas no tienen precedentes desde 1974 cuando fue dividida en varios servicios la ORTF, el ex organismo público francés de radio y televisión.
La huelga fue convocada por varios sindicatos para pedir garantías de financiamiento del sector, después del sorpresivo anuncio hecho por Nicolas Sarkozy el 8 de enero de supresión de la publicidad en el sistema audiovisual público.
Radio France Internacional (RFI) y la cadena de televisión internacional TV5Monde, también estaban perturbadas, debido a una huelga esta vez contra la reforma del sistema audiovisual dirigido al exterior.
El gobierno prevé la creación de una holding que comprenda la cadena de información France 24, RFI y TV5Monde, lo que provoca grandes inquietudes entre los asalariados y los asociados francoparlantes. El presidente de este holding podría ser nombrado el viernes.
El presidente francés prometió que los ingresos por concepto de publicidad serían “compensados integralmente” y debe pronunciarse en los próximos días sobre los medios de financiamiento alternativos. Pero las soluciones anunciadas, como un impuesto sobre los ingresos por concepto de la publicidad de las cadenas privadas o sobre el acceso a internet, provocan interrogantes entre los sindicatos y algunos actores del sector.
Los sindicatos deseaban un alza del impuesto para los usuarios de la radio y la televisión, que finanza actualmente parte del sector audiovisual, pero la presidencia descartó esta posibilidad.
El anuncio hecho por Sarkozy provocó sospechas de una próxima privatización de una de las cadenas de France Televisión, a pesar de las garantías que dio la ministra de la Cultura Christina Albanel. Los opositores al proyecto consideraron la decisión de Sarkozy era un “regalo” para las cadenas privadas, en particular la poderosa TF1.
De su lado, la oposición ha denunciado desde hace meses los vínculos entre el jefe del Estado y los empresarios de la prensa y de la industria. El Partido Socialista apoyó la huelga y pidió al gobierno que “renuncie al proyecto”.
Hecho inhabitual en France Televisión, varios ejecutivos anunciaron su intención de participar en la huelga, según destacaron los sindicatos.