Gobierno argentino aprobó nueva ley de medios audiovisuales
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Define al medio audiovisual como actividad social y de bien público
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Norma contempla regulaciones sobre contenidos, licencias y límites al monopolio
(AFP – Buenos Aires).- El gobierno de Argentina consiguió ayer que el Congreso convirtiera en ley un polémico proyecto que impone límites al monopolio de medios audiovisuales, amplía regulaciones estatales y define la actividad como social y de bien público.
La norma, resistida por parte del arco opositor y apoyada por organizaciones sociales, rompe el monopolio en los medios audiovisuales al limitar la cantidad de licencias de radio o de televisión que puede operar una misma empresa e imponerles el plazo de un año para adecuarse a la nueva normativa, lo que generó el rechazo de los empresarios mediáticos.
También establece mayor participación estatal en la autoridad de aplicación de la ley, a cargo de un organismo compuesto por miembros del Poder Ejecutivo, el Congreso Nacional y un Consejo Federal.
La nueva norma reemplaza a la aprobada durante la última dictadura (1976-1983) y que, según legisladores oficialistas, favorecía la concentración de los medios de comunicación en pocas manos.
El oficialismo obtuvo la aprobación gracias a una alianza de legisladores que responde a la presidenta peronista Cristina Kirchner y que reunió 44 votos contra 24 en la votación en general tras un arduo debate de 20 horas que concluyó la madrugada de ayer sábado.
La ley define en sus artículos a los medios audiovisuales como licenciatarios de “una actividad social y de bien público”.
Uno de los artículos más resistidos por las empresas es el que limita a diez las licencias que puede operar una misma empresa y establece que el licenciatario de una señal de televisión abierta sólo puede operar a la vez una señal de televisión paga.
La ley también establece pautas mínimas de producción nacional, en programas de radio, televisión y en emisión de música.
Las bancadas opositoras criticaron la iniciativa por entender que otorga excesivo poder al Estado para regular el otorgamiento de licencias en medios audiovisuales y objetaron la distribución de la pauta de publicidad oficial.
La norma divide en tercios el espacio radioeléctrico argentino con una parte en manos de empresas privadas, otra para el Estado y una tercera para ser operada por organizaciones civiles.